Más de 18.000 hectáreas de tierra que habían estado en poder de narcos y testaferros, gracias al Gobierno Petro ahora están en manos del campesino del Magdalena Medio

El Magdalena Medio fue una de las regiones más azotada por la violencia, allí se concentró el conflicto de distintos actores armados, luchas sociales y disputas por el territorio, por ese motivo, en esta subregión se ubican fincas que fueron utilizadas como centros logísticos para el procesamiento de droga, entrenamiento de grupos armados, y almacenamiento de armas. Fincas que hoy se recuperan y están regresando a manos campesinas para que puedan trabajar la tierra.

A la fecha, el mandatario ha estregado más de 18.000 hectáreas a familias campesinas y víctimas del conflicto, tierras que estaban bajo administración de la SAE, compradas por la ANT y recuperadas mediante operativos de aprehensión material en articulación con la Policía Nacional.

En total, 10 municipios de seis departamentos fueron beneficiados:

Caldas: La Dorada (713 ha).

Santander: Cimitarra (2.584 ha) y Sabana de Torres (179 ha).

Boyacá: Puerto Boyacá (3.289 ha).

Antioquia: Puerto Nare (1.255 ha), Puerto Berrio (2.613 ha), Puerto Triunfo (846 ha) y Yondó (3.676 ha).

Tolima: Honda (1.109 ha).

Cundinamarca: Puerto Salgar (1.757 ha).

Entre los predios más significativos, recuperados por el Gobierno nacional, figuran las tierras de Puerto Boyacá que pertenecieron a Gonzalo Rodríguez Gacha, alias ‘El Mexicano’, así como las fincas donde el mercenario israelí Yair Klein entrenó a los primeros grupos paramilitares. Hoy, esas hectáreas pasaron a manos de organizaciones rurales.

La histórica entrega llegó a organizaciones campesinas como la Corporación de Pescadores Artesanales y Campesinos del Magdalena, Acoem, Asociación Granjeros Campesinos Alameda, Corpividcamh, Asocampestu, Asociación Agrofuturo, Asomillas y Cooipa, entre otras.

En Honda (Tolima), 416 hectáreas fueron adjudicadas al pescador Arnulfo Ordoñez y a 39 familias más de la Asociación de Pescadores Artesanales, cumpliendo una promesa de campaña del presidente.

Con este acto, el Gobierno del Cambio cumple un mandato popular y reafirma la autoridad de tierras en el país que le permitirá a la Reforma Agraria continuar recuperando predios arrebatados con violencia y despojo, para devolverlos a las manos campesinas.